Japonés | Subs: Castellano/English (muxed)
74 m | x264 712x478 ~> 712x534 | 1950 kb/s | 192 kb/s AC3 | 24 fps
TV rip 1,12 GBEn el populoso y comercial barrio de Ginza -verdadero protagonista del film- una simpática niña de 5 años se pierde de la mano de su madre y un amable hombre-anuncio, en comandita con una joven limpiabotas y algún que otro personaje habitual de la zona viven enredosas peripecias para solucionar el entuerto. En paralelo a todo esto asistimos por supuesto a la búsqueda de la niña por parte de su madre.
El extravío de la pequeña, con giro melodramático -un tanto artificioso- incluído al final del film, no es más que una excusa para mostrarnos el trajín de personas que vienen y van, se divierten, compran o simplemente pasean por las calles del centro de Tokyo, mirando precios desorbitados y a seres de casi todo pelaje. Son estos tipos humanos los que quiere retratar Shimizu, como ya hiciera con los pasajeros del autobús conducido por el amable Arigatou San (Sr. gracias) muchos años antes. Está la empobrecida clase que viene al centro a babear por productos que no puede permitirse y que se gasta sus pocos yenes en las carísimas cafeterías. Está la fauna callejera de vendedores, hombres-anuncio, adivinos lampantes que no tiene para tabaco, chicas de compañía al asalto de empleados ociosos, serviciales vendedores… Y están los lugares en los que el consumismo se abre paso en estos primeros años de recuperación y despegue hacia el milagro económico de las siguientes décadas. El fastuoso centro comercial, la academia de inglés enfocada a las geishas, los teatros de variedades y mucho más. El día y la noche de un barrio que parece un mundo aparte, en el que nadie parece vivir, pero por el que nadie deja de pasar.
Shimizu es un director de exteriores, en especial disfruta rodando exteriores naturales con la cámara montada suponemos que en una camioneta, haciendo camino en interminables travellings frontales de acompañamiento. Aunque la ciudad no sea su medio favorito, el tratamiento visual de la película consiste igualmente en una sucesión constante de estos planos en movimiento que por cierto casan muy bien con la disposición urbanística del barrio, y permiten que, al menos en quienes no estamos familiarizados con él, atendamos a la historia del extravío de la niña con mayor interés, pues parece que en cualquier momento pueden cruzarse madre e hija, según la narrativa visual que desplaza a la verdad geográfica, despistándonos. Estos largos travellings, que quizá supongan la mitad del metraje, tienen un aire de improvisación que por lo visto refleja la forma de trabajar de Shimizu, que iba creando las películas un poco según se le iba ocurriendo, sobre la marcha, como afirman quienes trabajaron con él. De hecho todos los planos exteriores, siendo muchos, uno tiene la sensación de que se han rodado en un par de días, y me jugaría un sugus a que no voy desencaminado. Esa pátina apresurada que acerca un poco este cine al neorrealismo o al documental es una seña de identidad de la obra de Shimizu. En la mayoría de las ocasiones creo que la beneficia, porque conviene mucho a la sencillez de sus historias y sus protagonistas (en especial si son niños) pero en un contexto más complejo y sofisticado, como las calles de Ginza, quizá reste valor a la obra final.
Este estilo en exceso improvisado, unido a hilo argumental poco trabajado, con giro dramático final extraño y sopetonesco, hacen que quizá no se encuentre este “Retrato de Tokio”, que podría llamarse en castellano, entre las obras mayores del maestro, pero bien merece una visita.
Este estilo en exceso improvisado, unido a hilo argumental poco trabajado, con giro dramático final extraño y sopetonesco, hacen que quizá no se encuentre este “Retrato de Tokio”, que podría llamarse en castellano, entre las obras mayores del maestro, pero bien merece una visita.
--- Todo el texto en castellano es de Manuel Pozo en Tren de Sombras
A motley cast of characters, including a human billboard and a shoeshine
girl, help a 5 year old girl after she is separated from her mother on
the crowded streets of Ginza.
The street is the place to make memories. Strolling around Ginza,
finding people waiting for other people, or searching for something, or
working, or going somewhere, or simply strolling like yourself. Fun and
beautiful in ways words could never be able to describe. Shimizu’s
camera floats from one place to another with as much ease as the
narrative’s drifting quality, and the small jokes conjure an unmatched
joy out of people simply existing and interacting. A beautiful love
letter to Tokyo, the city where the only thing that matches how
expensive things are is how big its people hearts are. An essential film
to understand Shimizu: he wanted to do a joyful musical in honor of a
city, but reality kept getting in the way, so he just found the perfect
vehicle to stay true to his heart and his conscience.
-- Diogo Serafim in Letterboxd
Hay un restaurante llamado Yoshida en el distrito Ginza de Tokio, En una reseña histórica del negocio de hace unos años se habla de esta película de Shimizu;
"Aunque (el restaurante) Yoshida aparece en muchos ensayos de diferentes autores, su aparición en la película de 1953 Tokai no Yokogao (Perfil de Tokio), dirigida por Hiroshi Shimizu, es la que me ha causado mayor impresión.
La historia es sencilla. Una niña pequeña se pierde en Ginza y Ryo Ikebe, que lleva un cartel publicitario de bocadillos, e Ineko Arima, la limpiabotas, la ayudan. Una de las intenciones de la película ha sido publicitar Ginza restaurada tras la guerra, y es interesante ver cómo se muestran las tiendas existentes una tras otra. Encontramos a Hisaya Morishige en Wakamatsu, el café de estilo japonés donde la chica utiliza el lavabo, y al otro lado de la calle de Colombin, con su cartel publicitario en forma de Torre Eiffel, frente al Kobe Bank está el adivino Junzaburo Ban.
A medida que avanza la historia, Ineko Arima grita a un compañero limpiabotas: "Si entregas esto (un par de zapatos lustrados) por mí, te invitaré a una Croqueta Soba en Yoshida de camino a casa". Aunque no se muestra el restaurante en sí, podemos deducir que el Croquette Soba ya era popular en 1953."
La historia es sencilla. Una niña pequeña se pierde en Ginza y Ryo Ikebe, que lleva un cartel publicitario de bocadillos, e Ineko Arima, la limpiabotas, la ayudan. Una de las intenciones de la película ha sido publicitar Ginza restaurada tras la guerra, y es interesante ver cómo se muestran las tiendas existentes una tras otra. Encontramos a Hisaya Morishige en Wakamatsu, el café de estilo japonés donde la chica utiliza el lavabo, y al otro lado de la calle de Colombin, con su cartel publicitario en forma de Torre Eiffel, frente al Kobe Bank está el adivino Junzaburo Ban.
A medida que avanza la historia, Ineko Arima grita a un compañero limpiabotas: "Si entregas esto (un par de zapatos lustrados) por mí, te invitaré a una Croqueta Soba en Yoshida de camino a casa". Aunque no se muestra el restaurante en sí, podemos deducir que el Croquette Soba ya era popular en 1953."
TV rip y capturas de ronnie
subtítulos en castellano de Mario Vitale
Me da la impresión de que Shimizu perdió algo de su magia luego de la guerra.
Comparto este film que me pareció flojito para los que son admiradores del director como yo.
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