Arsenevich: Ulrich Köhler - Bungalow (2002)

"El capitalismo ya no tiene enemigos naturales, dice al pasar Max, hermano mayor del protagonista de Bungalow. Se trata de uno de los pocos parlamentos en el film, que trasciende en alguna medida la inmediatez de la anécdota que lo origina: en este caso, la reciente explosión de un supuesto depósito de gas en medio de un paisaje semi-rural del sur de Alemania poblado por personajes que no se dejan alterar fácilmente, ni siquiera por un acontecimiento repentino, que como la campanada de un gigantesco reloj, marca sin embargo uno de los tiempos fuertes del film.
"En torno a ese momento singular y en el fondo inexplicado, se extiende un vacío tiempo ambiguo, que Paul –el protagonista que acaba de desertar del ejército de manera tan natural e irreversible como cierto arquero wenderiano desertaba del fútbol– inicia con un viaje seguido de un vagabundeo más virtual que real, matizado con juegos y agresiones tácitas que hacen surgir pequeñas grietas en un ámbito al parecer tan pacífico y razonable, quizás del mismo modo en que el ocio veraniego cruje y amenaza hundirse al adosársele el ocio desnaturalizado de un fugitivo imprevisto, el silencio bucólico de la campiña se continúa en la sordera post-explosión, o el naturalismo mudo y a la vez crispado del film halla algo así como su destilado o quintaesencia secreta en los preparativos para el inminente rodaje de un film segundo, casualmente de ciencia-ficción."

"A partir de tan económicas premisas, un puñado de personajes taciturnos, y un humor impalpable, desencantado, pero que nunca condesciende al cinismo, la ópera prima de Ulrich Köhler sorprende en gran medida por esas convivencias inesperadas que apuntamos, que no llega a desvirtuar la sombra de una intención alegórica en sordina, evidenciada por un título que parece querer hacer de ese bungalow y del tiempo muerto que le resulta consustancial, la cifra quizás de nuestro presente. O del enorme camión de gas que se interpone en la escena final del retorno de Paul al cuartel, el presagio de nuevas y más poderosas deflagraciones."
-- Todo el texto es de FLV en la desaparecida revista Otrocampo

"In this enjoyable, laconic debut by German director Ulrich Kohler, a stop at Burger King provides the opportunity for Paul (Lennie Burmeister) to casually go AWOL from his army unit. The slacker teen heads off to his parents’ bungalow in order to resume his usual habits: lazing around the pool, jerking off, riding his skateboard and driving recklessly. Somehow he also finds the time to fall in love with his older brother’s girlfriend, a Danish actress who coyly encourages his attentions. Though lighter and nimbler than most recent German films, Bungalow still manages to nail the stultifying torpitude of modern teenagedom without resorting to Kids-style nihilism. Instead, Kohler’s tone is empathetic, comic and ruthlessly unsentimental."
-- Jason Anderson, Eye Weekly

"Disillusioned by the adult world in general and the military in particular, 19-year-old Paul (Lennie Burmeister) deserts, heading home to his parents’ bungalow in Marburg-Lahn, a small town in southern Germany. His attempts to mull over his future, Holden Caulfield style, are disrupted by the arrival of his brother Max and his Danish girlfriend Lene, whose allure proves too much to resist for the alienated teenager…
"Bungalow may share some of its zonked-out, uninflected unpredictability with Jessica Hausner’s Lovely Rita – another tale of alienated mid-European youth – but there’s much more humour along the way, and the final destination is, refreshingly, nowhere near as bleak. An added twist is that the town is being targeted by a mysterious bombing campaign, perhaps politically motivated – although, as somone remarks, Capitalism has no more natural enemies."
-- Neil Young's Film Lounge